Salsa Con Cabezas De Gambas

El gusto a marisco se logra incorporando cabezas de langostinos, si bien podrías incorporar asimismo nécoras, gambas, etcétera. Añadimos este batido a la salsa y dejamos cocer a lo largo de media hora. Karlos Arguiñano nos enseña de qué forma hacer salsa de america de manera muy sencilla. Explota el caldo de pescado y las cabezas de langostino para realizar entre las salsas mucho más populares de la cocina. Además nos muestra de qué forma llevar a cabo un flambeado para ofrecer intensidad a la salsa. Añadimos las cabezas y cascarillas de gambas, salpimentamos y cocinamos a fuego fuerte un par de minutos quitando esporádicamente.

salsa con cabezas de gambas

Una vez tengamos listo el caldo vamos a poder emplearlo como base en toda clase de arroces, guisos o salsas. Vamos a poder emplear la cáscara y cabezas de gambas, camarones o langostinos y vas a poder ser tanto frescos o congelados, mientras que estén crudos. Cuela la salsa con un colador y deja achicar durante 5-10 minutos. El truco para que no se corte, es en el momento en que pongamos medio aceite al comienzo, metemos el brazo batidor hasta el fondo y lo dejamos inmovil. Incorporamos en este momento a la olla las cáscaras y las cabezas reservadas, machacando las cabezas con la ayuda de una cuchara de madera a fin de que suelten su jugo. Regamos con un chorrito de coñac y ascendemos el fuego hasta el momento en que se haya evaporado el alcohol.

Elaboración Pasito A Pasito

Almacena mi nombre, correo y web en este navegador para la próxima vez que comente. Durante la cocción, se formará una espuma que iremos retirando, pues son las impurezas de las gambas y no las queremos en nuestro caldo. Quisiera que les complazca mi blog, donde comparto mi afición a la cocina con todos vosotros.

A continuación, le agregamos tres cucharadas de reducción de cabezas de gambas y la mitad de los aceites. Desplaza la salsa con una cuchara de madera mientras que densa, a fuego lento. Una vez tenga la textura aterciopelada, homogénea y un poco densa, retira la salsa de gambas del fuego y ya está lista para servir. En una sartén con aceite ponéis las cebollas picadas, los dientes de ajo en láminas y las zanahorias en rodajas. Cogemos un olla pequeña, le agregamos las siete cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra y cuando este caliente. Pruébala primero, aunque en un comienzo puede ser muy fuerte su sabor a gambas, se suaviza en combinación con los ingredientes que adereza.

Paso 1

Para realizar el caldo solo necesitaremos la piel y las cabezas crudas, con lo que vamos a poder explotar la carne para otras recetas. El caldo, en un caso así de gambas, camarones o langostinos, es un caldo concentrado sabrosísimo perfecto para emplear como base en otras elaboraciones. De esta manera conseguiremos arroces, guisos y salsas muy aromatizados que difícilmente conseguiríamos sin este ingrediente. Esta vez te traemos un platillo muy fácil de elaborar, es bastante con poner los elementos al horno y aderezar un poco.

Este fumé sirve bien para que tus paellas queden considerablemente más ricas, ya que la cabeza del langostino y la gamba es muy deliciosa. Prueba a llevarlo a cabo, es muy sencilla y además vas a salir ganando en sabor para tu familia. También se puede usar sencillamente el jugo que sueltan las cabezas para emulsionar con aceite en múltiples ensaladas. Con esta receta nos saldrá abundante caldo, con lo que si no lo vamos a utilizar en ese instante, una vez frío, se puede congelar en recipientes del tamaño aguardado para usarlo en otra ocasión. Almacena esta receta para hallarla mucho más de manera simple en el momento en que la desees cocinar. Se aplica la política de privacidad y los términos de servicio de Google plus+.

Salamos los filetes de dorada y los cocinamos en una plancha o sartén antiadherente con una migaja de aceite. Ya solo nos queda emplatar la dorada, junto con la salsa, y servir en ardiente. Cuando las verduras empiecen a están con transparencia agregamos el tomate frito, movemos y dejamos un minuto más al fuego. En mi lista de la compra frecuente no puede faltar el pescado, si bien, eso si, para lograr aprovechar al límite sus beneficios, me aseguro de comprar pescado con garantías de calidad, frescura y gusto. Entre los pilares básicos de nuestra conocida dieta mediterránea es el pescado. Se trata de un alimento sanísimo y nutritivo, que nos aporta vitaminas, proteínas y grasas de calidad, por lo que es mucho más que recomendable ingerirlo frecuentemente.

Mucho Más Recetas Del Autor/a

A continuación añadimos agua con un poco de sal y dejamos hervir unos minutos para obtener un fumé de langostinos o gambas y reservamos. Doramos bien hasta que cojan color y con la cuchara de palo machacamos las cabezas de los langostinos o gambas a fin de que suelten el jugo. Pasado el par dd minutos, retiramos del fuego la cazuela, la ponemos en la encimera y con la ayuda de una cuchara grande de madera, Machacamos las cabezas hasta que veamos que han soltado sus jugos. Las ensaladas templadas son una excelente opción para comer verduras en invierno, en especial por el hecho de que en esta temporada no nos gusta comer las habituales ensaladas con lechuga. En esta ocasión te alcanzamos un platillo muy fácil de preparar, es suficiente con poner los elementos al horno y aderezar un tanto. Además de esto, estamos seguros de que su sabor no te dejará indiferente.

Una vez que lo hayamos colado, le añadimos una pizca de sal, ámbas cucharas de salsa de soja con sal y una de las dos cucharas zumo de Lima. Una vez tibias las cabezas, las pasamos a una picadura o batidora y trituramos durante un minuto a máxima potencia por el hecho de que tiene que quedar muy triturado para sacarle el mayor potencial posible. Mezcla los elementos, y coloca al horno durante 8 minutos, a 200°C. Cuando ya esté todo lo anterior pochado, añadís el tomate y lo dejáis diez minutos aproximadamente.

Pasados los veinte minutos, retiramos la cazuela del fuego y dejamos tibiar. La Salsa de gambas que hoy hemos preparado es perfecto para llevar a cabo al unísono que haces el plato principal y servirla ardiente y recién llevada a cabo. Probablemente sobrará, solo tienes que guardarla en un tarro hermético en el frigorífico. Cuando la pruebes seguramente estarás deseando llevar a cabo otra receta para continuar su degustación, es una delicia. Añadís las cabezas de las gambas, que se refrían un tanto y con una cuchara de madera, las vais aplastando. Nací en pleno vecindario de La Isla, en Las Palmas de Enorme Canaria.