Tarta De Frutas Con Bizcocho Y Crema Pastelera

Pincelamos con el baño de brillo, asegurando que no quedan huecos sin contemplar. Tamizamos la harina dentro de un envase extenso y hondo, añadimos el azúcar y un pellizco de sal. Nací en pleno vecindario de La Isla, en Las Palmas de Enorme Canaria. Aprendí a desenvolverme en la cocina merced a mi madre y, de manera especial, a mi abuela, de la que aprendí trucos y recetas.

Cortamos el bizcocho en tres capas, bañamos generosamente con almíbar la primera cubierta y le ponemos crema pastelera de frutos rojos encima. Hija de andaluza y de padre catalan, en mi cocina encontraréis la mezcla de mis 2 raices y habituales de cocina. Abrí el blog Disfrutando de la Cocina en 2009 y mucho más adelante el canal de cocina, desde ese momento mi vida ha girado cerca de la cocina. Compartiendo las recetas de siempre de mi familia, por ejemplo.

Primero, ponemos los 4 huevos que deben estar a temperatura ambiente en un bol grande y los batimos para que espumen un poco. A continuación, le añadimos el azúcar en forma de lluvia sin dejar de batir. Continuamos batiendo a lo largo de unos minutos hasta hallar que la mezcla quede más clara, espesa y esponjosa para lograr el punto cinta. Se puede observar que llegamos a este punto cuando al levantar las varillas la mezcla cae de forma continua como una cinta sin que se deforme. La tarta de crema y frutas frescas es una de esas recetas que se hacen casi sin sentir, simple y perfecta para aquellos que comienzan en la cocina.

Tarta De Frutas

Después, la añadimos a la nata de a poco sin dejar de batir. Elegid una aceptable combinación de colores para crear contrastes y conseguir mejores resultados. En la elaboración de la crema pastelera tenemos la posibilidad de utilizar una vaina de vainilla, como sustituto de la esencia, y enriquecerla con la piel de un limón . También tenemos la posibilidad de obtener una lámina de masa quebrada en el supermercado y ahorrarnos este paso, aunque el resultado no va a ser el mismo.

Volcamos la masa en un molde y horneamos a 180ºC a lo largo de minutos. Almacena esta receta para encontrarla mucho más de manera fácil cuando la desees cocinar. Cuando esté lista la pasamos a un bol y la tapamos con papel largo a fin de que no se reseque por arriba hasta que se enfríe completamente. Luego, lo dejamos hervir en el transcurso de un par de minutos y ya lo vamos a tener listo.

Luego, lo dejamos hervir en el transcurso de un par de minutos y ahora lo vamos a tener listo. Añadimos la mezcla y batimos sin dejar de remover hasta el momento en que espese. Retiramos la cáscara y la rama de canela de la leche y encendemos el fuego muy bajo. La primera es la clásicatarta de frutasde toda la vida, una tarta rápida con base de masa quebrada cubierta con una suave crema y coronada con frutas de estación. Hace unos días os enseñamos de qué forma llevar a cabo masa quebrada de una manera rápida y fácil.

tarta de frutas con bizcocho y crema pastelera

Después, ponemos una generosa cubierta de nata montada cerca de toda la tarta y la alisamos. Seguidamente le añadimos el azúcar glass y batimos hasta el momento en que se disuelvan la nata. Primero, ponemos el azúcar junto con el agua y el ron en un cazo al fuego y lo removemos a fin de que se disuelva el azúcar. El baño de brillo se puede aromatizar con una cucharada chica de licor, agregándola al final del desarrollo y después de sacar el cazo del fuego.

Preparación De La Masa Base

Es importante que, en la elaboración de la masa base, la mantequilla esté bien fría. Una vez adquiera una rigidez como de mermelada acabamos la tarta. Colocamos el reto del agua en un cacito y calentamos. En el momento en que alcance el punto de ebullición apagamos y también incorporamos la gelatina hidratada. Transcurrido el tiempo de reposo estiramos la masa con un rodillo sobre una superficie tenuemente rebozada de harina, hasta unos cuantos milímetros de espesor. Entonces retiramos, pasamos a otro envase y reservamos tapada con un film transparente, en el frigorífico, hasta el día de hoy de su uso.

tarta de frutas con bizcocho y crema pastelera

Recibe un dirección de correo electrónico semanal con las nuevas recetas de rechupete. Recibe un email semanal con las novedosas recetas y sugerencias de rechupete. La masa base se puede elaborar con un par de días de antelación y tenerla horneada y lista para completar. Hidratamos la gelatina en un cuenco con 3-4 medidas de cuchara de agua a lo largo de cinco minutos. Cubrimos con papel sulfurizado de horno y rellenamos con legumbres viejas o bolas concretas para hornear.

Recetas

Cortamos las uvas por la mitad longitudinalmente. Ubicamos las frutas a nuestro gusto sobre la crema pastelera y rematamos con unas frambuesas en el centro. Desmoldamos la masa base cocida y la rellenamos con la crema pastelera, propagando bien por toda la área, sin llegar al borde. Necesitaremos un poco de espacio para poner las frutas sin que se desborden. Ubicamos en un molde desmoldable aceitado la primera plancha de bizcocho genovés para usarlo como base.

Preparación De La Crema Pastelera

Necesitaremos algo de espacio para poner las frutas sin que se desborden. La crema pastelera es súper fácil de preparar y muy rica, tanto que dan ganas de comerla a cucharadas. Nada que ver con las industriales y bien merecedora de ese muy pequeño esfuerzo. Primero elaboramos el bizcocho, el almíbar, la crema pastelera de frutos colorados, montamos la nata y esperamos que todo esté bien frío para empezar a montar la tarta. En el momento en que comience a espesar le añadimos el puré de frutos rojos que habíamos guardado y cocinamos a fuego retardado hasta que espese.

Este tipo de recetas nos semejan de lo más fáciles, sencillas y exquisitas. Indudablemente, estas ideas son maravillosas para lograr gozar del maravilloso gusto y las grandes características de la fruta en una tarta de lo mucho más deliciosa. Además le he añadido corteza de 1/2 limon y se que da muy buena. Sí, es similar a la masa quebrada (que si lleva un huevo, poseemos también la receta en el blog) pero en un caso así deseamos un mayor crujiente, de ahí que no lo lleva.